Me vinculé con el
"Vuelo a Vela" durante el invierno de 1972. Mi relación con el medio aeronáutico en esos años era la práctica del aeromodelismo; hasta ese momento sólo lo practicaba casi de manera solitaria, en algunas oportunidades acompañado de algún amigo que generalmente nada tenían que ver con la actividad y lo hacían por simple curiosidad.
El Club de Planeadores Junín por medio de su subcomisión de aeromodelismo dictaba un curso de construcción y vuelo de aeromodelos, allí fui.
Realicé el curso y comencé a participar en concursos locales y regionales; de a poco me fui interesando por los planeadores reales, terminé cambiando de actividad, el Vuelo a Vela logró seducirme.
Me integré al club y allí conocí un grupo de gente realmente formidable, la gran mayoría por suerte aún están; algunos pocos partieron en un vuelo "prefijado sin retorno", entre ellos se encuentran Rafael Frene, José Casais y Vicente Nazar, con quienes mantuve una relación amistosa muy particular. Quiero recordarlos y brindarles mi pequeño y humilde homenaje.
Utilizo palabras del cantautor argentino Alberto Cortés:
Cuando un amigo se va queda un espacio vacío que no lo puede llenar la llegada de otro amigo
Rafael Frene - Un piloto destacado
José Orlando Casais - Trabajador incansable
Vicente Ricardo Nazar Anchorena - El destino cortó las alas de su esperanza