
En el mes de enero de este año se disputó en las instalaciones del
Club de Planeadores Santa Rosa el
8º Campeonato Nacional Clase "Club", el más nutrido de todos los disputados hasta ahora (con 44 participantes) para la categoría, pero, sobre todo, con un excelente nivel de los concurrentes, tal como nos tiene acostumbrados en esta corta historia. Pero no se trata sólo de un campeonato de clase
"Club" de buen nivel: las estadísticas demuestran que la clase
"Club" es la categoría de mejor nivel de nuestro volovelismo, tomando todas las categorías. Por lo menos de la historia reciente.
Los participantes del 8º Campeonato Nacional Clase "Club", concurrimos a Santa Rosa cargados de expectativas de poder volar en las condiciones que le conocemos a la zona y que hemos podido disfrutar en varias oportunidades (me cuento entre ellos). A su vez, los locales trabajaron muchísimo para poner las instalaciones del club en las mejores condiciones. Todo estaba dado para tener un campeonato de altísimo nivel, en todos los sentidos.
La realidad se encargó de destrozarnos todas esas ilusiones y terminamos teniendo un campeonato que se validó con lo justo, pero que consagró a justos ganadores. Pero como todos conocemos los resultados finales, ahora quiero entrar a analizar otro aspecto, que es el de los pilotos concurrentes.
¿Cómo podemos calificar el nivel de los campeonatos? Esta es una pregunta que nos hacemos desde hace mucho tiempo. Siempre hemos visto el nivel de los mundiales o de los europeos y nos llamaba la atención la cantidad de pilotos de alto nivel que participaban de los mismos, privilegio que no podíamos ostentar por estas latitudes, por razones de distancia y por la imposibilidad de juntarnos con los hermanos brasileros y chilenos, los únicos partenaires con que contamos por estas latitudes.
En cualquier deporte de nivel de excelencia y de trascendencia internacional, se destaca la participación de los campeones vigentes o anteriores como una muestra del nivel de la competencia. Esto pasa en las carreras de Fórmula 1, de NASCAR, del mundial de Rally, de motociclismo o en nuestro más telúrico Turismo Carretera.
Es en este sentido que la participación de muchos campeones es un indicio de buen nivel en cualquier categoría de cualquier deporte.
Cuando vamos a los Nacionales de las clases tradicionales (las combinadas con hándicap), sean estos de dos o de tres clases (como los últimos tres disputados), todos los campeones en actividad (que tenemos muchos) se dividen en dos o tres clases, atomizándose el nivel de cada una de ellas.
Y aclaro: esto no les quita relevancia a los ganadores, sólo estoy hablando de nivel de los competidores. Pero es tan así, que la F.A.V.A.V. se vio en la necesidad de imponer un número mínimo de participantes en las categorías para darle justamente ese nivel a las clases. Esto es particularmente visible en la Clase "Libre", siempre la de menor número de participantes (en todo el mundo) y es llamativamente notable en los últimos certámenes de la Clase "Standard", que ha convocado a muy pocos participantes en sus últimas ediciones.
Volviendo a la Clase "Club", fue creada por la Federación Argentina de Vuelo a Vela en el año 2013, apenas pasado el Mundial que se realizó en Adolfo Gonzales Chaves y al influjo del triunfo de Santiago Berca en la Clase "Club" de ese campeonato.
Desde hacía algún tiempo se conversaba en la F.A.V.A.V. de la posibilidad de crear una clase similar a la mundialista para usar la mayor parte de nuestro parque de planeadores (bastante veterano ya), discutiéndose sobre el reglamento a aplicar, el sistema de hándicap, los planeadores que podrían ingresar y otras minucias. Pero lo cierto es que, en 2013, bajo la gestión de José Damiano, se resuelve su creación (adoptándose el reglamento de la F.A.I.) y en el 2014 se desarrolla su primer evento nacional, siendo Javier Gaude el primer Campeón Nacional (y el más entusiasta impulsor de la nueva clase). Con el pasar de los años el reglamento fue teniendo algunas modificaciones mínimas pero el espíritu de la clase se mantuvo y los campeonatos fueron tomando cada vez mayor nivel.
En nuestro país, con los vientos fuertes y condiciones de térmicas extremas, ya durante el Mundial de 2013 se vio que los planeadores que en Europa van bien en la clase, acá no podrían ni arrimar: el Std Libelle "007" alemán que venía de ganar en el mundial anterior (en Prievitza, República de Eslovaquia, 2010), aquí ni arrimó. Por el contrario, los Jantar Std. 2 y los LS4 funcionaron muy bien.
Nuestros pilotos de punta de entrada se entusiasmaron con la categoría y ese efecto tuvo su ratificación en el reciente nacional, lo cual se vio potenciado por la última modificación reglamentaria que permitió la incorporación de nuevos planeadores a la categoría, como los LS6, los Ventus A y B y los Janus C. Una medida que cuenta con adeptos y detractores, ya que cada vez se les hace más difícil a los planeadores de la mayoría de los clubes (Cirrus Std y Jantar Std. 2) concurrir y aspirar a alguna figuración interesante.
Lo cierto es que la categoría se fue consolidando con el transcurrir de los años y se fue definiendo con sus propias características. Se pobló de LS4 (al principio) y de ASW 20 luego, que se perfila como el nuevo dominador de la categoría, peleándole ese sitio a los LS4. Mientras tanto, fueron perdiendo terreno los Jantar Std. 2.
El primer campeonato (Rivadavia, 2014) contó con 34 participantes (una muy buena convocatoria) y en el podio se ubicaron Javier Gaude (con LS4) seguido por los hermanos Gonzalo (LS4) y Sebastián Riera (ASW 20), de los cuales Sebastián venía de consagrarse Campeón Mundial Clase "Mundo" en Cháves. Volaron diez pilotos que eran (o serían) campeones nacionales, seis de los cuales ocuparon los diez primeros puestos. Ya se veía el potencial de la clase.
Al segundo Nacional (Junín, 2016) lo disputaron 21 participantes (una de las dos convocatorias más escasas) y en el podio se ubicaron tres campeones, encabezados por Dino Ghioni (LS4, y seguido por Martín Bossart (ASW 20) y Manuel Darrain (LS4), los que más adelante se impondrían en otros nacionales de la "Club". Los siete (7) primeros puestos fueron ocupados por quienes eran o serían campeones nacionales, otra muestra de lo difícil que fue en ese evento entrar entre los diez primeros puestos. Entre los pilotos intervinientes había diez (10) campeones, casi la mitad de los participantes. Otra demostración del nivel de la categoría.
En el caso del 3º Campeonato Nacional (Santa Rosa, enero de 2017, en el primero de los que se volaron ahí ese año), volvimos a los 30 participantes y se impuso el zarateño Felipe Girado (Silent 2E), seguido de Martín Darrain (Cirrus de 17m) y Maximiliano Luengo (ASW 20), primer integrante de un podio que no ha sido campeón. En este caso fueron nueve (9) los campeones o futuros campeones que participaron.
En diciembre de 2017 la troupe volvió a Santa Rosa a disputar el 4º Nacional de la Clase, en el que se impuso (en la cancha) Javier Gaude (ASW 20), pero que totalmente a destiempo, y de una forma totalmente antirreglamentaria, la Federación lo sancionó quitándole los puntos de la última prueba, por lo que figura en los papeles como ganador Sebastián Luengo (ASW 20), seguido de Martín Bossart (ASW 20) y Lucas Goldenzweig (Janus B), primer biplaza en subir al podio de la categoría. Aquí se juntaron solo 19 participantes (la menor cifra hasta la actualidad), de los cuales diez (10), más de la mitad, eran o serían ganadores de nacionales.
Sin perjuicio que Sebastián había hecho todos los méritos para acceder a un muy justificado subcampeonato, la historia le deberá reconocer este campeonato a Javier. La dirección del campeonato analizó su conducta en la llegada de la última prueba y consideró que no se habían violado los reglamentos, declarándolo ganador. En forma totalmente extemporánea, con posterioridad la Federación reabrió el caso y consideró lo contrario.
De haber existido una falta no sancionada por la organización, la F.A.V.A.V. debió sancionarlo hacia adelante (impidiendo su participación en algún evento posterior, por ejemplo), pero no debió modificar un campeonato que ya estaba consolidado por la organización que la misma F.A.V.A.V. avaló, cuando ya estaban vencidos todos los plazos para impugnar los resultados. De aplicar en el futuro este criterio, ni Roberto Rizzi podría estar seguro de sus 14 campeonatos ganados.
Pasando al 5º Nacional, en A.Gonzales Chaves en el año 2019, participaron en esta oportunidad 39 pilotos (otra excelente convocatoria), de los cuales diez (10), o sea la cuarta parte, eran o serían campeones nacionales. Después de nueve pruebas, se terminó imponiendo Matías Lanzinetti (LS4), seguido por Maximiliano Luengo (ASW 20), en su segundo podio, y José Dentone (LS4). En esa oportunidad se ubicaron siete campeones nacionales en los diez primeros puestos.
En diciembre del mismo año 2019 el 6º Nacional de la Club se realizó en Rivadavia, competencia para la que se volvieron a anotar 39 pilotos, de los cuales quince (15) eran o serían campeones y que ocuparon ocho de los primeros diez lugares del certamen. Ese número es increíble. Otra particularidad de este campeonato fue la reaparición de Roberto Rizzi (nuestro piloto más ganador), que voló con el Janus A ("OO") del Albatros. Después de diez (10) exigentes pruebas y de una lucha notable entre los punteros, se terminó imponiendo muy bien Martín Bossart (ASW 20), seguido de Javier Gaude (LS4) y de José Dentone (ASW 20), otro de los abonados a los podios (tiene tres terceros puestos). Los hermanos Goldenzweig ocuparon el quinto y sexto puesto. Otra particularidad de este evento fue la lucha entre el grupo de planeadores ASW 20 de los zarateños (y adherentes) contra el solitario LS4 de Gaude y la pareja de los hermanos rosarinos. Terminó siendo una competencia de gran nivel.
En diciembre de 2020, con todos los problemas derivados de la pandemia de Covid 19, sólo veintitrés (23) pilotos se dieron cita en Junín para disputar la séptima edición del Nacional de la Clase "Club". De ellos, once (11) eran campeones, casi la mitad de los participantes y ocho ocuparon los diez primeros puestos de la final. Notable.
En otro campeonato memorable de diez (10) pruebas, se volvió a imponer Javier Gaude (LS4), seguido por Dino Ghioni (ASW 20) y Sebastián Luengo (ASW 20). Dentro de los 10 primeros los únicos LS4 fueron los del ganador y los de Lucas y Damián Goldenzweig, que ocuparon el 9º y el 10º puestos: todos los otros fueron ocupados por ASW 20.
Por último (hasta ahora), en enero de 2022 nos convocamos en Santa Rosa, para continuar en ese proceso de consolidación, donde concurrimos a participar 44 competidores (récord de inscriptos para la clase), de los cuales trece son campeones nacionales y/o Panamericanos!! Como vemos, se sigue manteniendo muy alto el porcentaje de campeones que participan de la categoría, en lo que es una constante histórica.
En efecto, entre Damián Goldenzweig (13), Javier Gaude (6), Javier Sondón (3), Lucas Goldenzweig (2), Martín Bossart (2), José Dentone (2), Felipe Girado (2), Raúl Garda (1), Dino Ghioni (1), los hermanos Martín y Manuel Darrain (1 cada uno), Sebastián Luengo (1) y el campeón panamericano Carlos Iucci (1), suman 35 campeonatos ganados por ellos.
Resulta notable el número de inscriptos también. Para la F.A.I. la cantidad máxima por categoría es de cincuenta (50) participantes y, como vemos, estamos muy cerca de tener que poner un límite a los inscriptos. É:ste es otro dato notable del interés despertado por la categoría.
Esta aglomeración de campeones, a los que se suman otros pilotos que permanentemente están luchando por la punta en los nacionales, le dio al certamen santarroseño una jerarquía muy importante, que no se puede juntar en las otras categorías, porque todos estos nombres se reparten en las distintas clases. Como hemos visto, este alto porcentaje de campeones participando se mantiene en todos los eventos de la clase.
Si siempre dijimos que los campeonatos europeos eran el mejor entrenamiento de los pilotos para los mundiales (por el elevado nivel de sus participantes), un nacional de la Clase "Club" argentina será, indudablemente, el mejor entrenamiento de los nuestros para ir a un mundial. Y esto es una realidad, una muy buena realidad para nuestro deporte.
Los más veteranos recordamos que siempre decíamos que hubiera sido muy bueno poder enfrentar en una misma clase (lo que no ocurría casi nunca) a los dos pilotos que dominaron la década de los 70 y los 80, Roberto Rizzi (nuestro piloto más ganador) y Jorge Riera (entre otros), pero eso casi nunca era posible.
Hoy esa posibilidad es una gran realidad, lo que les da una muy buena oportunidad a nuestros pilotos a enfrentarse entre los mejores y a esmerarse en hacerlo lo mejor posible.
Está claro que los resultados de éste Nacional no son representativos de la calidad de pilotaje de cada uno, no se puede sacar un orden de méritos de la general. El campeonato estuvo signado por pésimas condiciones meteorológicas (con la entrada y permanencia de una masa de aire muy caliente en el centro del país, que llegaba hasta La Pampa), y fue muy corto (sólo cinco pruebas) lo que condicionó totalmente la realización de la competencia.
No obstante, los ganadores fueron los que hicieron mejor las cosas en esos escasos cinco días de prueba. Otro dato, que da una prueba más de la tesis que estoy elaborando: los tres integrantes del podio fueron campeones nacionales, en una constante de todos los ocho campeonatos.
En ese marco, es muy meritorio lo realizado por Maximiliano Luengo que (en dos oportunidades) es el único no-campeón que ha ocupado el podio en los ocho eventos de la Clase. Verdaderamente notable. También se destaca que en todos los podios (salvo en el 5º Campeonato, Chaves 2019) siempre hubo un piloto de Junín en el podio.
En definitiva, la Clase "Club" es una creación muy importante de la F.A.V.A.V. que, con el apoyo de los pilotos nacionales, cada año se va consolidando como una categoría muy importante en nuestro calendario anual deportivo. Y para eso, la Federación debe seguir dándole su lugar y no superponerla con otras clases o competencias, para tratar de garantizar la mayor concurrencia posible.
Dejaremos para otra oportunidad el análisis de cómo va evolucionando el parque de máquinas empleadas para competir en la Clase. En Europa la categoría sirve para que puedan volar los veleros ya excluidos de las competencias de primer nivel. Lo que pasa en nuestro país es que justamente esos veleros son los más usados en los Nacionales de las categorías tradicionales, en la "15 metros" y la "Standard" justamente. Y ya se ha ido perfilando el futuro inmediato. Por ejemplo, igual que en la categoría "Standard", ya no vuelan los Standard Cirrus y casi han dejado de participar los Jantar Std. en todas sus variantes, pese a que Santiago Berca se impuso en el Mundial de Cháves con uno de ellos. Es para ir pensándolo.
Es de imaginar hacia el futuro que la categoría se seguirá consolidando y haciendo cada vez más grande, que todos los pilotos que amamos la competencia en este deporte y nos gusta medirnos con los mejores (además de con nosotros mismos), la seguiremos apoyando y que los nuevos encontrarán en ella la mejor manera de medirse y evaluarse.
Eso sí, les aseguro que será muy difícil entrar entre los diez primeros: ocupan esos lugares casi con exclusividad los campeones. Y no demuestran querer dejar ese sitial para los novatos o los veteranos que no podemos llegar.
A modo de cierre, sé que alguno de mis planteos es polémico. Si alguien no está de acuerdo con lo expresado previamente, muy bueno sería que lo exprese públicamente. Esta será la forma de encontrar la exacta descripción de la realidad, para ir obteniendo los datos para escribir la historia de nuestro deporte que, dicho sea de paso, nos la estamos debiendo.
Córdoba, 18 de agosto de 2022